Restricción de cupo revela fuerte escasez de divisas

Las restricciones en Venezuela para acceder a dólares para viajar al exterior y para realizar compras por internet, debido a un rígido control de cambio de hace más de una década, remite una señal clara: El gobierno no tiene dólares.

La medida supone un ahorro, según la banca de inversión Barclays Capital, de unos 2.800 millones de dólares, lo que quiere decir que la asignación bajará de 3.800  millones de dólares a menos de 1.000 millones de dólares en 2015, por concepto de cupo viajero y electrónico.

Economistas coinciden en que esta decisión se iba a tomar en diciembre del año pasado, pero en vista de su alto costo político el Gobierno prefirió esperar unos meses por si el barril del petróleo subía. Pero no fue así.

Anabella Abadi, economista y analista de Entorno y Gestión Pública de ODH Consultores, explica que “el ahorro que estaría registrando el Gobierno ($2800 millones) corresponde a tan solo 28 días de importaciones y solo representa el 2% de la deuda que tiene Venezuela calculada por JP Morgan en 140 mil millones de dólares”.

La deuda incluye los compromisos de deuda externa que deberá honrar Venezuela este año, así como los compromisos con  China, que ha financiado al Gobierno en los últimos años.

Una cifra que indica la fuerte escasez de divisas que tiene Venezuela y que el gobierno busca alternativas para “disminuir la salida de dólares en vista que no tiene una manera sostenible de aumentar la cantidad de sus reservas en divisas porque el barril de petróleo sigue bajando”, según Abadi.

Se calcula que el país deje de recibir 25.000 millones de dólares por la caída del petróleo, que actualmente se ubica en menos de 50 dólares por barril.

Según datos del Banco Central al 10 de abril, las reservas internacionales se colocaron en 20.173 millones de dólares, el nivel histórico registrado desde el 14 de noviembre del 2014 cuando se colocaron en 19.438.

El presidente de Datanálisis, Luis Vicente León, considera que la decisión que tomó el gobierno al reducir los dólares por concepto de viaje “fue poco inteligente” porque lo que se ahorra por un lado “se lo gasta en sobrefacturación”.

La solución para Leon es sencilla: “reactivar la producción nacional para depender menos de las importaciones y liberar el sistema cambiario”. A su juicio, “no hay ninguna forma de resolver los desequilibrios graves de la economía venezolana sin unificar y abrir el mercado cambiario”.

Para el analista es un error que el gobierno ataque a los “raspacupos” porque es lo mismo que hace con los bachaqueros y la escasez. “Hay que tener un poco de sindéresis y comenzar por las causas y no las consecuencias del problema”. Destaca que en las condiciones actuales “cualquier gobierno racional estaría lanzando un plan de ajuste a través de acuerdos nacionales”.

Sin embargo, José Grasso, director de SOFTline Consultores, escribió en su cuenta Twitter que el mercado internacional sí vio con buenos ojos esta decisión y prueba de ello es que los bonos venezolanos aumentaron porque supone “más pago de intereses y capital”.

“El promedio anual solamente en gastos de viaje en los últimos años ha sido de aproximadamente 4.000 millones de dólares”, agregó.

Contradicciones

Por otro lado, mientras el gobierno reduce las divisas a los venezolanos por concepto de turismo la factura de Petrocaribe sigue intacta. El economista Luis Oliveros asegura que “la factura total de Petrocaribe, con un barril a 50 dólares, es de 2.700 millones de dólares para este año”. Lo que quiere decir que “antes de recortar los subsidios de petróleo a otros países el gobierno prefiere quitárselo a los venezolanos”, denuncia.

Una situación que también se reflejó en 2014 “cuando se disminuyó la asignación de dólares viajeros en 25% en comparación con 2013, cuando se entregaron 5.100 millones de dólares para los cupos viajeros y electrónicos”.

Agregó, que no hay suficientes dólares que cubran la demanda y descartó que la reducción del cupo sea el primer paso para levantar el control de cambio. “La escasez de divisas es tan grave que pasamos de liquidar 14 millones de dólares diarios a 1 millón y medio, que es lo que otorga Simadi todos los días”, aseguró Oliveros.

Por último, el economista descartó que la banca privada sufra consecuencias negativas por quedar excluidas en la asignación de dólares viajeros. “Todo lo contrario. Esos bancos deben estar felices aunque ninguno de ellos lo admita”.

Asegura que las divisas que son consumidas en el exterior a través de los bancos provienen el banco central “y ya sabemos cuánto se pueden tardar ellos para pagar sus compromisos”.

En el país están vigentes tres tipos de cambios de 6,30 bolívares para alimentos y medicinas; para viajes y otras importaciones prioritarias a 12 bolívares, y para todo lo demás el Sistema Marginal de Divisas (Simadi) que ronda los 193-194 bolívares. Además del mercado paralelo que cotiza en promedio 60 bolívares más que el sistema de libre flotación.

La resolución 011 que limita el cupo de divisas fue anunciado en la Gaceta Oficial 40.636 el viernes cuando el presidente Nicolás Maduro se encontraba en Panamá en la Cumbre de las Américas. 

Por Marisela Castillo

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