Cuba sabe lo que quiere: Inversión extranjera
Cuba aprobó el pasado sábado una nueva ley de inversión extranjera que modificará mucho la vigente de 1995, bajará el impuesto a las ganancias a la mitad (15 %) y dará mil facilidades al capital foráneo. Es parte clave de las reformas para “actualizar” el sistema económico de la isla comunista. Se autorizarán inversiones en todos los sectores, menos las FFAA y las áreas que son "emblema" de la revolución: salud y educación.
La ley de Inversión Extranjera aprobada por la Asamblea cubana en plenaria contempla un régimen especial tributario para eximir también de impuestos personales a los inversionistas extranjeros socios en empresas mixtas, o que sean parte en contratos de asociación económica internacional. Y elimina el pago de impuestos corporativos sobre utilidades por un período de ocho años, que el Gobierno del presidente Raúl Castro puede extender por más tiempo a su voluntad. Lo paradójico es que Cuba es mayor aliado del Gobierno del presidente Nicolás Maduro y en Venezuela sucede exactamente todo lo contrario. Se ataca cada día más a la empresa privada, se ahuyentan imprescindibles inversiones y se criminaliza al empresariado sea criollo o foráneo.
Hasta la semana pasada el Gobierno del presidente Raúl Castro sólo contemplaba tres modalidades de inversión extranjera: las empresas mixtas (donde el estado suele tener al menos el 51 % de las acciones), los contratos de asociación económica internacional y unas muy pocas empresas de capital totalmente foráneo.
Se prevé el establecimiento de plazos concretos para la aprobación de inversiones extranjeras, que deberán ser autorizadas por el Consejo de Estado, el Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros o el jefe del organismo competente en función de la importancia que tengan los proyectos presentados.
Pero lo importante para Cuba es dar a los capitales externos protección y seguridad jurídica. Garantiza, por ejemplo, que esas inversiones no podrán ser expropiadas "salvo por motivos de utilidad pública o interés social previamente declarados por el Consejo de Ministros". Y la contratación de trabajadores cubanos, uno de los aspectos que más preocupa a los empresarios foráneos, se seguirá realizando como ocurre hoy en el sector turismo y otros y, de paso, como a los inversores más les conviene: a través de una agencia empleadora estatal, que de hecho es el verdadero patrón con todo lo que eso implica en detrimento de la justa remuneración, la sindicalización y otras ventajas a las que los trabajadores gozan en los países no comunistas.
El Dato
Cuba bajará el impuesto a las ganancias a la mitad (15 %) y dará mil facilidades al capital foráneo.
Tomando el pulso
Lo + Leído
Banplus celebra su 10° Aniversario
La Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, con ponencia de su presidenta, magistrada Gladys María Gutiérrez Alvarado, admitió la demanda de protección de derechos colectivos interpuesta
54% de los encuestados opina que se trata de una megadevaluación del bolívar y el 16% asegura que este nuevo mecanismo contradice el concepto del socialismo que predica el gobierno.