Un Fin de Año en alerta en Europa y EEUU

El año que acaba viene marcado en Europa y Estados Unidos por el azote terrorista de corte yihadista y hasta el último día se mantendrá un nivel alto de alerta por la posibilidad de un atentado durante las celebraciones de fin de año. Ciudades europeas como Bruselas o París incluso han optado por suspender las celebraciones.

Muchos países de la UE recibieron en los últimos días una advertencia de una agencia de inteligencia no identificada en el sentido de que había riesgo de ataques terroristas en las capitales europeas en los últimos días del año saliente. En el aviso se mencionaban “nombres de varios terroristas potenciales”.

Precisamente, el pasado martes la policía belga detuvo a dos sospechosos de planificar un atentado durante las celebraciones de fin de año en Bruselas. La investigación, en la que fueron detenidas seis personas, cuatro de ellas liberadas, ha revelado “amenazas serias de atentados en lugares emblemáticos de Bruselas durante las fiestas de fin de año”, según la Fiscalía belga. Hay que recordar que en Bélgica es donde se fraguaron los atentados de París del 13 de noviembre.

Ayer mismo, la policía turca detuvo a otros dos sospechosos de querer perpetrar un atentado suicida en Ankara durante las celebraciones de fin de año. Precisamente, para garantizar la seguridad de la celebración, decenas de miles de agentes estarán desplegados en las principales ciudades turcas, especialmente en Ankara y Estambul. Unos 15.000 agentes municipales prestarán servicio durante esa noche en Estambul. Unos 5.000 policías vigilarán la céntrica plaza Taksim y la adyacente calle Istiklal. Un importante número de los agentes irán de civil, disfrazados como vendedores de castañas, de rosquillas o de lotería, de limpiabotas o incluso de ‘papá Noel’.

El alcalde de Bruselas, Yvan Mayeur, ha decidido anular los fuegos artificiales y todas las festividades planificadas para fin de año en el centro histórico de Bruselas. Los fuegos artificiales iban a tener lugar sobre el cielo de la plaza De Brouckère, en pleno corazón de la capital belga. Solo los mercadillos de Navidad en el centro se mantienen. Mayeur ha tomado esta decisión basándose en el último informe del Órgano de Coordinación para el Análisis de las Amenazas (OCAM) y la reunión mantenida hoy por el Centro de Crisis de Bélgica, quien le indicó que “el riesgo es importante”. La Policía se desplegará en el centro de la ciudad para velar por la seguridad de todos aquellos que quieran salir a las calles. En Bruselas, al igual que para el resto de Bélgica, sigue en vigor el nivel tres de alerta terrorista de cuatro posibles, y la policía y los militares siguen patrullando las principales avenidas de la ciudad.

Francia reforzará la seguridad durante las celebraciones en las principales ciudades del país con un despliegue de 60.000 policías y militares y 21 compañías de agentes antidisturbios, en una movilización sin precedentes. En la capital, el 80 % de los agentes de policía estarán sobre el terreno. Los emblemáticos festejos que cada año se suceden en los Campos Elíseos y en las inmediaciones de la Torre Eiffel no se han suspendido, pero sí se verán acortados en el tiempo de espectáculo y en la programación de las actividades de animación. Este año la ausencia de fuegos artificiales en los minutos de entrada al nuevo año marca en la celebración una infrecuente sobriedad y austeridad, para homenajear a las víctimas de los ataques terroristas.

También se tomarán medidas extraordinarias en Moscú, donde la Plaza Roja, el corazón de la ciudad donde es tradición festejar la llegada del Año Nuevo, estará cerrada esta noche al público, oficialmente por la grabación en directo del programa especial de Nochevieja. Algunos expertos, sin embargo, han señalado que el Kremlin teme atentados terroristas en la noche más concurrida del año y por eso ha decidido tomar una medida de seguridad sin precedentes en ese centro neurálgico de las celebraciones para todo el país.

Londres es una de las ciudades más visitadas durante estas fechas, y sus autoridades mantienen alto el nivel de alerta terrorista por los mismos avisos. La Policía Metropolitana ha informado de que aumentará la presencia de agentes policiales armados en las calles de la capital británica durante la noche de Fin de Año a fin de “tranquilizar” a la población. Se prevé que cientos de miles de ciudadanos salgan a celebrar el final de 2015 viendo los tradicionales fuegos artificiales en el centro de la ciudad.

Policía y ejército reforzarán el número de efectivos desplegados para garantizar la seguridad en las celebraciones de Fin de Año en las grandes ciudades italianas, aunque oficialmente el Gobierno evita indicar que exista una alerta específica. Tres mil policías y más de 6.500 soldados serán desplegados en todo el territorio dentro de las medidas de refuerzo que, en Roma consisten en el despliegue de 800 agentes de policía y 750 guardias urbanos. Estos se unirán a los militares que patrullan por sus calles tras los atentados yihadistas del pasado noviembre en París.

Viena es otra capital europea en alerta después de que el sábado, la policía austriaca anunciara un aumento de sus medidas de seguridad tras recibir información de un servicio de inteligencia amigo sobre posibles ataques con explosivos y disparos en algunas capitales europeos estos días.

En Madrid, dos cinturones policiales regularán la entrada a la Puerta del Sol en fin de año, la primera en la que se hará un conteo de los asistentes, con únicamente cuatro puntos para acceder al kilómetro 0 y alrededores, carrera de San Jerónimo, calle Alcalá, Mayor y Arenal. Los cortes y filtros se realizarán en dos cinturones con el fin de garantizar la seguridad ciudadana. En el dispositivo participarán unos 600 efectivos.

Al otro lado del charco, Nueva York desplegará unos 6.000 agentes de policía en Times Square para garantizar la seguridad durante los festejos de Nochevieja, un operativo mayor que nunca en respuesta a recientes atentados terroristas como los de París o San Bernardino. “Estamos convencidos de que la Nochevieja en Nueva York será el lugar más seguro del mundo en el que uno puede estar”, aseguró hoy el jefe de antiterrorismo de la policía de la ciudad, James Waters. Se espera que un millón de personas se reúnan en el centro de Manhattan para dar la bienvenida al año nuevo. Vía La Vanguardia