Crimen organizado amenaza la democracia según estudio

Un fuerte debilitamiento de las estructuras estatales y la desconfianza de la población en ellas, es solo uno de los resultados que reflejó  la I Encuesta sobre Delito Organizado, realizada por la organización Paz Activa, el Laboratorio de Ciencias Sociales (Lacso) y el Observatorio Venezolano de Violencia con el apoyo de la Unión Europea. El estudio se llevó a cabo entre los meses de junio y julio, tomando muestras representativas en todos los centros urbanos del país.

No es de sorprender que los encuestados al preguntárseles sobre los principales problemas que sufre el país, su ciudad y la localidad donde viven, identificaran a la inseguridad como el más resaltante entre todos. En este sentido, un 70% de los encuestados respondió que en los últimos 12 meses la inseguridad personal ha aumentado.

Sin embargo, según el estudio los venezolanos incluyen la corrupción y el delito organizado dentro de la lista de los problemas que perciben en su entorno. Y al solicitarles enumerar tres delitos relacionados con el crimen organizado, un 45% mencionó la corrupción, los atracos también fue nombrado por el 45%, y un 44% incluyó los homicidios. Con respecto a esta pregunta, el 40% de los encuestados expresó que el tráfico de drogas es uno de los delitos llevados por el crimen organizado en Venezuela.

La encuesta además evidencia que al menos un 20% de los consultados tiene conocimiento de casos de tráfico de armas cortas y municiones en su localidad y al menos 36% piensa que es fácil adquirirlas en su propia comunidad, situación alarmante considerando las cifras por armas de fuego en el país; así como las iniciativas del Estado para el desarme de la población civil. De igual manera, el 61% de los encuestados afirmó que es fácil tener acceso a drogas como marihuana o piedra en los alrededores de su vivienda.

El director de Lacso, Roberto Briceño León, indicó que la mitad de los encuestados pertenecían a hogares con ingresos menores a los 5.000 bolívares mensuales, representando así las características socioeconómicas de la población venezolana en general. Según el sociólogo, esto demuestra que el crimen organizado ya no opera exclusivamente en las altas esferas económicas como tradicionalmente se pensaba, sino que hay estructuras de menor tamaño presentes en las barriadas populares, pero engranadas de alguna manera con estructuras delictivas de mayor envergadura.

Autoridades en la mira

Como muestran los resultados del estudio, un 56% de los venezolanos opina que la policía en general está involucrada en delitos del crimen organizado y un 29% afirmaron tener conocimiento de casos donde funcionarios policiales están involucrados en este tipo de felonías. Al solicitarles identificar los cuerpos policiales mas involucrados en ello, no hubo mayor distinción entre las policías municipales (36%), estadales (39%) y la Policía Nacional Bolivariana (31%).  Igualmente, un 52% opinó que los militares han sido corrompidos por el narcotráfico.

Sobre el sistema judicial del país, un 58% de los encuestados  opinó que las cárceles son una de las instituciones más relacionadas con el crimen organizado en el país, mientras que los jueces y el Tribunal Supremo de Justicia les siguen con un 41% que opinan que la institución judicial está muy involucrada con la red de vandalismo.