Inflación de tres dígitos estaría a la vuelta de la esquina

Las cifras del Índice Nacional de Precios al Consumidor que fueron publicadas la tarde del jueves, 12 de junio, por el Banco central de Venezuela (BCV), si bien no tomaron por total sorpresa a los especialistas en análisis económico, obligaron a un replanteamiento de proyecciones inflacionarias para este 2014.

En resumen, la variación intermensual de los meses abril y mayo se ubicó en 7,5%; la anualizada a mayo, en 60,9% y la inflación acumulada en los primeros cinco meses del año ya llegó a los 23 puntos. Asdrúbal Oliveros, economista y director de la empresa consultora Ecoanalítica, sostiene que ante este panorama, lo que se avecina no parece positivo.

“Estas cifras están mostrando la gravedad de la situación económica en Venezuela. La inflación acumulada en los primeros cinco meses equivale a la inflación de Perú en casi seis años. Es un síntoma de que la política económica es un fracaso y que el Gobierno no está tomando las acciones necesarias para corregir los problemas. En la medida en que esto ocurra la inflación continuará desbordada”, afirmó el experto.

Conflicto político

Para el economista, el salto inflacionario intermensual que llevó al indicador de 2,7% en febrero y 4,1% en marzo a 5,7% en abril y mayo responde  a un “agresivo financiamiento monetario del BCV a empresas públicas, como Pdvsa”, a la política de ajuste precios y al ajuste cambiario traído por la tasa Sicad II. La conflictividad política que habría motivado el incremento en el índice, según se leyó en el informe del Banco Central, no tendría nada que ver, a ojos del director de Ecoanalítica.  

“El tema de ‘guarimba’ y el tema político no tiene nada que ver. El tema de la inflación es de naturaleza estrictamente económica. Tanto no tienen que ver el hecho de que el año pasado la inflación saltó de 20% a 56% para cierre de año, sin ningún tipo de guarimba. Es simplemente una excusa que está utilizando el Gobierno para eludir su responsabilidad de la mala política económica”, expresó Oliveros.

De tres dígitos

En cuanto a lo que viene para la segunda mitad del año, a partir de los números revelados este jueves, Oliveros dice que lo estimado por Ecoanalítica en meses pasados como un máximo para final de año, pasó a ser la proyección mínima. “Nuestro estimado estaba en torno a 75,3%. Pero, probablemente, ese número se quede corto. Hoy ya no lo vemos como un estimado de máximo de inflación, sino más bien como un punto mínimo sobre el cual puede estar la inflación”.

El especialista no descarta que la inflación para cierre de año pueda ser, inclusive, de tres dígitos. Lo que aproximaría el indicador al máximo histórico nacional. “No es descabellado que la inflación esté cerca del 100% este año. Sobre todo si continuamos con estas tasas intermensuales en torno a 5% o superior. Esta tasa de inflación podría acercarse mucho a lo que fue el máximo histórico en Venezuela, que fue el 103% de 1996”, afirma.

La salida del hueco inflacionario en el que se hoy se ve sumergida la economía nacional, a los ojos del experto, estaría en un desmontaje del control de cambio. A pesar de las cifras, la idea de una unificación cambiaria sigue viva, aunque su implementación llevaría los indicadores del INPC aun más arriba, momentaneamente.

“Una vez que haces el proceso de unificación hay un salto que tiene influencia en los precios. Pero luego, si se toman los correctivos necesarios, empieza una reducción de la inflación (…). En el 96, después del establecimiento del sistema de bandas cambiarias, la inflación se redujo de 103% a 12%, en 2001. No puedes temerle al efecto que vas a tener en el primer momento de arranque del ajuste”, explica.

No obstante, señala que, de darse, el proceso deberá venir acompañado por un plan de ajuste con medidas a corto, mediano y largo plazo, para lograr efectivamente reducir los índices inflacionarios.

El director de la consultora señala que no es posible recobrar una economía saludable sin enfrentar costos elevados, y correr la arruga sólo empeoraría los impactos de venideros ajustes.“En la economía el tiempo pesa. En la medida que le sigas teniendo miedo a hacer el ajuste porque vas a tener un impacto inflacionario,  pues ese impacto inflacionario va a ser peor. La pérdida de bienestar que va a sufrir la gente –todos: empresas y particulares- es más grande cada día”.

“Pensar que vas a salir de esto agachado, que puedes resolver el problema de nuestra economía sin costo para la gente, es iluso. Estamos en un punto donde, lamentablemente, cuando alguien decida corregir, eso va a tener un efecto duro en la gente”, apunta. “Vienen momentos difíciles para todos los venezolanos. Esto va a ser costoso”, cierra el economista.

Mariel Torres

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