Pobre Estado interventor sin diésel

La falta de gasoil para el sector productivo del país está llegando a límites impensables hasta hace relativamente poco.

De hecho, Fedeagro acaba de alertar que para este semestre al gremio le harían falta unos 40 millones de litros del carburante para salir de la crisis.

Por ello, valoramos el anuncio del presidente Nicolás Maduro de un plan para abastecer de combustible a los productores que se debería cumplir en unos 60 días, pero generalmente eso no ocurre.

Ahora bien, cabe preguntarse por qué el Estado tiene que intervenir en todo y si la producción del campo aguantará tanto tiempo.

Pareciera que no es posible, porque durante varios meses se venía advirtiendo que la escasez de gasoil iba a perjudicar no solo la producción de alimentos, sino su transporte. Pobre estado interventor que no permite crecer la actividad privada.

Las consecuencias ya se están viendo. El aumento de los precios de los rubros como queso, huevos o carne, por mencionar algunos, es palpable.

Al preguntar a los comerciantes, la excusa del aumento es que cuesta tanto el transporte de los productos que al final lo deben cargar a los consumidores.

Un cartón de huevos casi llega a los 10 millones de bolívares y el simple queso blanco ya pasó de esa cantidad.

Al cambio son unos dólares, pero gran parte de los venezolanos no gana en divisas.

Repetimos, saludamos el anuncio del presidente y ojalá lo pueda implementar, si no diremos otra vez, pobre Estado interventor. Está en todo, pero al final su objetivo teórico de beneficiar a los pobres fracasa y terminan sufriendo la escasez y los costos altos.

No en vano, hay en camino varios buques cargados con combustibles y se espera su pronta llegada.

Además, también se está haciendo un esfuerzo con las refinerías, aunque es tarde. Y siempre culpando las sanciones, pero ojalá este Estado interventor logre algunos resultados para los más necesitados.

La situación es crítica

Sin embargo, el detalle es que en el interior del país la situación es crítica. Por ello, gremios de empresarios han planteado la posibilidad de que los dejen importar combustibles.

En este sentido, la Cámara de Comercio de Maracaibo hizo la petición, para que la empresa privada pueda importar combustible, mientras se arregla el parque refinador nacional.

«El suministro de gasolina proveniente de la producción propia e importaciones, pareciera haberse estabilizado a lo largo de todo el país, menos en los estados Zulia y Táchira. Las colas para surtirse de gasolina en estaciones de servicio que venden el combustible a precio dolarizado, ya no se miden en horas sino en días», dice el comunicado y el diésel desaparece.

Están conscientes de que las leyes venezolanas no permiten que privados puedan importar hidrocarburos. No obstante, señalan que puede hacerse a través de permisos extraordinarios de las autoridades.

La decisión final está en manos del Ejecutivo, de este estado interventor en todo.